Qué bien me lo pasé anoche leyendo estas dos grapas antes de dormir, de verdad os lo digo. Mis números favoritos de la serie, sin duda. ¿Sabéis el "chascarrillo superheroico" que siempre os digo que me gusta? ¿El sarcasmo, el duelo de egos y la rivalidad sana entre personajes? Pues aquí. Disfruto con la dinámica de grupo, y es en estos números donde he empezado a ver un funcionamiento real como equipo.
Sumémosle un puñado de situaciones adorables (madre mía, Singularidad, qué peluche de personaje), un Jorge Molina que está empezando a desarrollar personalidad propia, y un color cósmico brutal, amiga Martin.
Gosado, muy gosado.