Providence #2

Iä! Iä! Alan Moore fhtagn!

Continúa la investigación del pobre Robert Black que, como buen protagonista lovecraftiano, se adentra más en la boca del lobo con cada página.

Si en el primer recopilatorio teníamos un terror sugerido, psicológico, con referencias a la obra de Lovecraft que los fans disfrutarían pero que los no iniciados podrían pasar por alto, en el segundo tomo ya pasamos al tomate.

Moore gira un poco el dial de la tensión, Jacen Burrows -qué maravilla de arquitectura hace este señor- nos dibuja terrores que ya son físicos, alteraciones temporales, y estresantes y terroríficas situaciones que van 'in crescendo'. Sigue siendo una obra densa, pero probablemente este tomo sea más directo y entretenido que el anterior.

Punto muy negativo: en su 'Black Dossier' de The League of Extraordinary Gentlemen Moore ya usó la narración en prosa como recurso, algo que no gustó a mucha gente pero sí a mí, ya que ampliaba el mundo de los cómics. En este tomo de 'Providence' el guionista intercala largas entradas del diario del protagonista que me parecen innecesarias: largas, tipografía incómoda de leer, y no avanzan nada, o nada que los lectores no hayan podido inferir por lógica durante las páginas dibujadas. Creo que va precisamente en contra de lo que es un cómic.