Telephone killed the teenage sidekick.
Un gran ejemplo de cómic con un valor histórico muy superior a su valor argumental. Haters gonna hate.
Enormes portadas de Mike Mignola, algunas impactantes y dramáticas viñetas del gran Jim Aparo, y unas deducciones detectivescas y justificaciones argumentales tan facilonas (infantiles en ocasiones) que el guión parece haber sido escrito 20 años antes.
Eso sí, contiene uno de esos momentos -incluido por ECC con gran tino- que tanto enriquecen la historia del cómic de superhéroes: el mítico anuncio en el que DC permitía a los lectores decidir el futuro de Jason Todd.
Si queréis conocer la historia completa podéis ir a mi vídeo '¿Quienes son Robin?'.