Hoka hey!

Adelante.

Mirad esos cielos. Cielos, praderas y montañas, bosques y nubes que dejan escapar algunos rayos de sol. Amaneceres, atardeceres y fuegos de hogueras dignos de cuadros romanticos. Esto es algo que nos ofrece en grandes cantidades 'Hoka hey!' de Neyef, y creedme que me bastaría con ello (pero por fortuna no es lo único). Es una historia de venganza más cultural que personal, tarantiniana en sus formas (centrada aquí en la aniquilacion de la cultura nativa americana tras la conquista del oeste) protagonizada por un variopinto grupo de forajidos, con la razón, si bien no la ley, de su parte, que recogen por el camino a un niño nativo americano criado desde pequeño en la cultura blanca y el cristianismo, lo que dara lugar, entre balasera y balasera, a mucho debate acerca de la importancia y diferentes grados de cultura e identidad en una persona que se encuentra entre dos o más mundos (así como a las similitudes entre loa inmigrantes irlandeses y los nativos americanos, que son más de las que puedan parecer a simple vista). Un cómic bellísimo, impecable en lo visual, que escapa de lo esperable en la puesta en escena del western gracias a la iconicidad y el color en sus diseños de personaje. Encantará a les que, como yo, sientan debilidad por las historias de justa venganza. Mi única pega, que empaña un poco la espectacularidad del título, es una mala costumbre que ha sido tradicionalmente bastante habitual en el álbum europeo y que no esperaba encontrar aquí, como es el menosprecio y maltrato (manido) del único personaje femenino protagonista, que para nada queda a la altura de la potencia que este ofrece desde el principio. Algo le tenía que fallar, y al margen de esto me parece un cómic redondo, y de los mejores del pasado año.

Traduce Lorenzo F. Díaz.

Cartoné. 232 paginas. 35€