El perro de la vecina

Te reviento, Snoopy.

A mitad de camino entre el costumbrismo francés y el humor negro del thriller lynchiano encontramos al perro de Sébastien Lumineau. Con un trazo que recuerda precisamente a la tira cómica dominical con animales inteligentes de por medio (me viene a la cabeza el 'Mutts' de Patrick McDonnell ahora mismo), Lumineau nos lleva, con muy mala baba, a la comodidad de las familias suburbiales, que se ve truncada por un perro que no se lleva bien con los niños. Los padres tratarán de arreglar la situación hablando con su bella y joven dueña, lo que a su vez inicia un retrato patético de la crisis (¿clásica? ¿rancia?) de los 50. Escenas absurdas y cómicas de lectura desenfadada mezcladas con otras en las que el existencialismo te devuelve la mirada... y un puñado de giros siniestros, que es algo que me gusta mucho. Todo esto con el lazo perfecto: una edición preciosa que imita en tipografia, color y tacto a un libro que podría haberse publicado en los años 50. Qué bonito publica esta gente de fuera del mainstream (Fulgencio Pimentel, en este caso).

Cartoné. 120 paginas. 20€