Juventud, maldito tesoro.
Me da rabia y me siento mal por no haber hecho todo el ruido que este título merece, pero es uno de esos cómics que sale en el peor momento (el vacío legal veraniego) y se cuela entre las rendijas de las pilas de lectura, listas, tops, etc. A eso le sumas mi descontrol de los últimos meses, y apaga y vámonos.
Elias Ericson nos cuenta (y nos muestra con trazo limpio aunque de herencia underground) a historia, con subidas y muchas bajadas, de dos amigues, adolescentes de 17 años, que también se cuelan por las rendijas que les dejan apartades: las de lo no normativo, lo no binario, las movidas de salud mental, el descontrol y el vicio en sociedad propios de la edad. Los márgenes. Adolescencias desestructuradas por la falta de formación en el entorno y de comprensión paterna por culpa del salto generacional, para las que una amistad que las entienda puede ser lo único que las mantiene a flote. Un retrato actual, sincero, bonito (pese a su crudeza), y de una cercanía europea que es refrescante y muy de agradecer, porque los referentes anglosajones nunca terminan de encajar del todo con lo nuestro. Muy recomendable para adultos que quieran entender y para adolescentes en fase contestataria y de descubrimiento.
Traducción de Alba Pagán.
Rústica con solapas. 224 páginas. 18€