La Casa de la Playa

Octubre aún es verano.

Ahora que llega el frío me gustaría quiero recuperar este precioso álbum de Séverine Vidal y Víctor L. Pinel (cuya entrevista podéis ver en el Show de Comic Freak #49) porque me trae cálidos recuerdos y conecté con él de una forma interesante. Es más, creo que la gran cualidad de esta historia es que es casi imposible no conectar con ella. Todes tenemos un sitio familiar donde nos juntamos y es especial de alguna manera, ya sea la casa de la playa, del pueblo, el local de no sé dónde, la cabaña de tal sitio, el apartamento de aquel otro... tal vez sea un lugar propio, de un familiar, un amigo, alquilado, prestado, abandonado, nacional o extranjero, pero creo que en todas las familias hay alguno así, y todos tienen algo que perdura, incluso aunque no vuelvas en muuuucho tiempo. Algo que huele a primer hogar y a años formativos.

La casa de Vidal y Pinel reúne a tres generaciones diferentes después de muchas décadas, con sus rencillas, sus formas distintas de relacionarse con la casa, y sus vidas reales y ajenas a ella, aunque una vez dentro parezcan ponerse en pausa. Me gusta esa relación tan irreal, de vida puesta en standby, que Pinel refleja con tanta tranquilidad y ternura en este reflejo narrado a través de los años. El único defecto que le voy a sacar (soy así de mimimi): una subtrama bajonera que lo flipas que da la sensación de estar ahí para proporcionar un girito dramático jugoso, y que creo que tendría más razón de ser como historia aparte, o más desarrollada, o no estar presente en absoluto, porque empaña bastante la sensación general del resto del tomo. Muy guay.

Cartoné. 176 paginas. 22€