To lo rojo.
Nueva oportunidad para el personaje con un comienzo potente, como potente es el equipo: Kelly Thompson, una "joëllejonesizada" Elena Casagrande (muy interesante salto ha pegado), colores de Jordie Bellaire y portadas increíbles de Adam Hughes. Seguramente me haga la serie directamente en edición española (no soy nada fan del personaje, pero habitualmente le ponen equipos creativos que me interesan, sobre todo en lo visual), pero quería echarle un ojo al primer número USA después de los comentarios positivos que había leído en Internet.
No me ha volado la cabeza en el sentido de que es una serie superheroica al uso, sin sorpresas, pero si tiene un par de detalles que me han gustado y que juegan a su favor: primero, que nos alejamos de las tramas de espionaje/Rusia/guerra fría/duros recuerdos, que me tienen un poco hasta las narices ya. Aquí Thompson se pone juguetona y nos presenta a una Natasha que, por algún motivo, después de una misión, parece estar viviendo una vida "normal" que ella cree ser su vida real... Para preocupación de aliados como Ojo de Halcón y el Soldado de Invierno, que están preocupados por ella. Y ese es el segundo punto de interés: la interacción con el resto de personajes del Universo Marvel y desde el primer momento. No como invitados sorpresa en una grapa puntual, sino como secundarios de lujo. Algo que, bien hecho, enriquece no solo la serie sino el Universo Marvel en general, y que hace que este nuevo volumen del personaje desde un poco por encima de las otras propuestas superheroicas. Elena Casagrande está eléctrica y dinámica, y Bellaire hace lo suyo tirando de color plano que le va muy bien a lo anguloso del dibujo de Casagrande. Por lo pronto es un número uno por encima de la media, pero sin volvernos locos. Seeeeguiremos informando.