Ugh. Escritores torturados.
Iba con miedo a que Noah Van Sciver (al que de momento llamo mentalmente "el Van Sciver bueno") me la liara, porque no soporto el subgénero "cómics autobiográficos de artistas torturados que se comportan como auténticos gilipollas y son personas terribles muy desagradables pero se lo perdonamos porque son Artistas Torturados y en realidad su pena es profunda". Nah. Esto es una sátira sencillita y breve sobre ese tipo de personajes malditos. Acepto barco.
Rústica con solapas. 92 páginas. 13,50€